domingo, 27 de diciembre de 2009

El albatros, Charles Baudelaire

L'Albatros

Souvent, pour s'amuser, les hommes d'équipage
Prennent des albatros, vastes oiseaux des mers,
Qui suivent, indolents compagnons de voyage,
Le navire glissant sur les gouffres amers.

À peine les ont-ils déposés sur les planches,
Que ces rois de l'azur, maladroits et honteux,
Laissent piteusement leurs grandes ailes blanches
Comme des avirons traîner à côté d'eux.

Ce voyageur ailé, comme il est gauche et veule!
Lui, naguère si beau, qu'il est comique et laid!
L'un agace son bec avec un brûle-gueule,
L'autre mime, en boitant, l'infirme qui volait!

Le Poète est semblable au prince des nuées
Qui hante la tempête et se rit de l'archer;
Exilé sur le sol au milieu des huées,
Ses ailes de géant l'empêchent de marcher.


EL ALBATROS
Traducción de Enrique López Castellón

A menudo, por divertirse, los hombres de la tripulación
cogen albatros, grandes pájaros de los mares,
que siguen, como indolentes compañeros de viaje,
al navío que se desliza por los abismos amargos.

Apenas les han colocado en las planchas de cubierta,
estos reyes del cielo torpes y vergonzosos,
dejan lastimosamente sus grandes alas blancas
colgando como remos en sus costados.

¡Qué torpe y débil es este alado viajero!
Hace poco tan bello, ¡qué cómico y qué feo!
Uno le provoca dándole con una pipa en el pico,
otro imita, cojeando, al abatido que volaba.

El Poeta es semejante al príncipe de las nubes
que frecuenta la tempestad y se ríe del arquero;
desterrado en el suelo en medio de los abucheos,
sus alas de gigante le impiden caminar.


Charles Baudelaire

sábado, 30 de mayo de 2009

Juego de niños

- ¿Tú qué quieres ser de mayor?
- Un tirano
- ¿Un tirano? ¿Con un pueblo sometido y todo?
- ¡Pues claro! ¿Y tú?
- ¡No te lo digo, que te vas a reir!
- Vamos, dime
- Quisiera ser un flan, un flan de albaricoque o uno normal, un flan tibio en el escaparate de una pastelería
- ¿Un flan, un postre?
- Pues claro, ¿Qué sino va a ser? ¡No hay cuarenta mil cosas
que se llamen flan!

[...]

- Nunca hemos hablado del futuro tú y yo. Me refiero a nuestros futuros.
- ¿Nuestros futuros? Yo habría dicho inconscientemente nuestro futuro, supongo que me conformaba con el presente...Supongo que nos veía seguir así siempre. ¡Qué estúpida!
- Lo siento Sophie.
- Sí, lo siento Sophie. Por cierto, hablamos del futuro una vez, y no nos equivocamos mucho, tú estás aprendiendo a ser un tirano y yo un flan.

Quiéreme si te atreves

Tu mirada

Me miraste a los ojos, penetrando,
en lo más profundo de mi alma.
El cristal azul de tus pupilas,
me mostraba, mi imagen reflejada.

Me miraste y pediste temblorosa
que un te amo, saliera de mis labios,
pero ellos ya no tienen más palabras
pues los golpes de la vida los han cerrado.

Me miraste y tu pelo se erizaba,
y una gota redonda en tu pupila
que brotó, de un corazón roto
y cayó recorriendo tu mejilla.

Me miraste y tu rostro empapado
me exigía una palabra, una respuesta,
y mentí diciéndote te amo
por ganar de tu cara una sonrisa.



Walt Whitman(Version de Leandro Wolfson)

jueves, 21 de mayo de 2009

Dicen que la juventud es tu edad predilecta, y dicen que la primavera es el tiempo en que sueles aparecer, Amor. Yo no puedo creerlo. Tú, que marcas el rumbo de las constelaciones,y diriges hasta los más pequeños ritmos de la tierra; tú, que conduces a los perros por los delicados caminos del olfato, y engarzas a las mariposas con larguísimos hilos invisibles; tú, que embelleces a cualquier criatura para seducir a otra, y organizas imprevistos y suntuosos cortejos nupciales, no puedes restringirte a una edad ni a una hora… No es que seas el aliado del día o de la noche, de la luz, de la lluvia, de la carne y del alma de la carne: es que eres todo eso. La vida tiende a ti; levanta su oleaje atraído por ti, igual que las mareas por la luna, y tú cubicas sus caudales, aforas sus corrientes,mides sus resplandores, distribuyes sus verdes avenidas. Tú eres la fuerza de la fuerza;por ti reinan los reyes, y besan los cautivos sus cadenas. Tú eres la mano que sostiene al mundo,y eres el mundo y sus ciegos sentidos. Tú dispones los granos de incienso dela felicidad y las charcas salobres de la pena. Sólo queda fuera de tu jurisdicción el tiempo inmóvil y vacío de la melancolía. Por eso yo no creo que tengas edades y estaciones:una mirada, un libro, un río, una canción, una manera de entrelazar los dedos…Tú, el águila bicéfala.


El dueño de la herida,Antonio Gala

domingo, 17 de mayo de 2009

lunes, 11 de mayo de 2009

Comiat

Ja no sé escriure, ja no sé escriure més.
La tinta m'empastifa els dits, les venes...
-He deixat al paper tota la sang.

¿On podré dir, on podré deixar dit, on podré inscriure
la polpa del fruit d'or sinó en el fruit,
la tempesta en la sang sinó en la sang,
l'arbre i el vent sinó en el vent d'un arbre?
¿On podré dir la mort sinó en la meva mort,
morint-me?
La resta són paraules...
Res no sabré ja escriure de millor.
Massa a prop de la vida visc.
Els mots se'm moren a dins
i jo visc en les coses.


Josep Palau i Fabre

jueves, 7 de mayo de 2009

El crepúsculo matutino

La diana cantaba en los patios de los cuarteles, y el viento de la mañana soplaba sobre las linternas.

Era la hora en que el enjambre de los sueños malhechores crispa sobre sus almohadas a los adolescentes morenos; en que, como un ojo sangriento que palpita y se mueve, la lámpara pone sobre el día una mancha roja; en que el alma, bajo el peso del cuerpo huraño y pesado, imita los combates de la lámpara y el día. Como un rostro en llanto que las brisas enjugan, el aire está lleno del estremecimiento de las cosas que huyen. Y el hombre está cansado de escribir y la mujer de amar.

Las casas aquí y allá comienzan a echar humo. Las mujeres de placer, con los párpados lívidos, la boca abierta, duermen con su sueño estúpido; las pobretonas, arrastrando sus senos flacos y fríos, soplan sobre sus tizones y sobre sus dedos.

Es la hora en la que entre el frío y la tacañería se agravan los dolores de las mujeres parturientas; como un sollozo cortado por una sangre espumosa, el canto del gallo desgarra a lo lejos el aire brumoso; un mar de neblinas baña a los edificios, y los agonizantes, en el fondo de los hospitales, exhalan su estertor en hipos desiguales. Los crápulas regresan, destrozados por sus andanzas.

La aurora, tiritando en traje rosa y verde, avanza lentamente sobre el Sena desierto. Y el sombrío París, frotándose los ojos —viejo trabajador— empuña sus herramientas.


Charles Baudelaire


lunes, 4 de mayo de 2009

Sin embargo me muevo


De cuando en cuando soy feliz!,
opiné delante de un sabio
que me examinó sin pasión
y me demostró mis errores.

Tal vez no había salvación
para mis dientes averiados,
uno por uno se extraviaron
los pelos de mi cabellera:
mejor era no discutir
sobre mi tráquea cavernosa:
en cuanto al cauce coronario
estaba lleno de advertencias
como el hígado tenebroso
que no me servia de escudo
o este riñón conspirativo.
Y con mi próstata melancólica
y los caprichos de mi uretra
me conducían sin apuro
a un analítico final.

Mirando frente a frente al sabio
sin decidirme a sucumbir
le mostré que podía ver,
palpar, oír y padecer
en otra ocasión favorable.
Y que me dejara el placer
de ser amado y de querer:
me buscaría algún amor
por un mes o por una semana
o por un penúltimo día.

El hombre sabio y desdeñoso
me miró con la indiferencia
de los camellos por la luna
y decidió orgullosamente
olvidarse de mi organismo.

Desde entonces no estoy seguro
de si yo debo obedecer
a su decreto de morirme
o si debo sentirme bien
como mi cuerpo me aconseja.

Y en esta duda yo no sé
si dedicarme a meditar
o alimentarme de claveles.


Pablo Neruda

jueves, 30 de abril de 2009

Vénen temps dolços

No t'espanti aquest vent. Mira, setembre
se'ns ha endut l'estiu. Totes les coses
una llum de biaix les fa més dolces
i també més serenes.

Ve el temps d'anar a passeig, pausadament,
sota els arbres que, pàl·lids, ja tremolen.
Ara ens cauran els dies com les fulles,
daurades de records.

Tindrem hores madures com raïms,
assolellades, tendres, saboroses
de silencis intensos. Melangies
dels primers crisantems...

No t'espanti aquest vent, que du temps dolços.


Narcís Comadira

miércoles, 29 de abril de 2009

Romeo y Julieta

ROMEO [adelantándose]
Se ríe de las heridas quien no las ha sufrido.
Pero, alto. ¿Qué luz alumbra esa ventana?
Es el oriente, y Julieta, el sol.
Sal, bello sol, y mata a la luna envidiosa,
que está enferma y pálida de pena
porque tú, que la sirves, eres más hermoso.
Si es tan envidiosa, no seas su sirviente.
Su ropa de vestal es de un verde apagado
que sólo llevan los bobos ¡Tírala!
[Entra JULIETA arriba, en el balcón]

¡Ah, es mi dama, es mi amor!
¡Ojalá lo supiera!
Mueve los labios, mas no habla. No importa:
hablan sus ojos; voy a responderles.
¡Qué presuntuoso! No me habla a mí.
Dos de las estrellas más hermosas del cielo
tenían que ausentarse y han rogado a sus ojos
que brillen en su puesto hasta que vuelvan.
¿Y si ojos se cambiasen con estrellas?
El fulgor de su mejilla les haría avergonzarse,
como la luz del día a una lámpara; y sus ojos
lucirían en el cielo tan brillantes
que, al no haber noche, cantarían las aves.
¡Ved cómo apoya la mejilla en la mano!
¡Ah, quién fuera el guante de esa mano
WILLIAM SHAKESPEARE

martes, 28 de abril de 2009

:)

Marina sonrió y, ante mis ojos atónitos, se desprendió de su vestido blanco y se zambulló en la laguna. Apareció a mi lado riéndose. Aquello era una locura, en esa época del año. Pero decidí imitarla. Nadamos con brazadas enérgicas y luego nos tendimos al sol sobre las piedras tibias. Sentí el corazón acelerado en las sienes, no sabría decir a ciencia cierta si a causa del agua helada o como consecuencia de las transparencias que el baño permetía dilucidar en la ropa interior empapada de Marina.

Marina, Carlos Ruiz Zafón

lunes, 27 de abril de 2009

Per què escric?

Per poder pensar, per no passar per ull, perquè no sigui dit, per arribar al pot de la confitura, per compromís, perquè sí, per ressuscitar els vius i els morts, per casualitat, per no perdre el fil, perquè estava escrit, per embolicar la troca, per elevar un misto cremat en homenatge a la universal estrella apàtrida catalana, per elevar la temperatura, per participar-hi, per fugir-ne, per quatre pessetes, perquè no tinc cua, perquè algú bé hi ha de posar la cara i dir-ho, perquè si no no sé qui som ni què representem, perquè em foten crits, perquè m'estimen, per renegar de tot i de tothom, perquè tires la pedra i qui sap on va, perquè no pot ser, per fer-te companyia, per ara, per tota una sèrie de circumstàncies que no cal explicar, perquè ni el bosc ni l'asfalt no esborrin el camí de casa, per una mena d'insatisfacció universal, perquè he vist reflectits a un vidre els dits d'un vell que ballaven un instant damunt la porta quan entrava al menjador, perquè t'hi fixis, perquè no es pot enterrar la veritat, per escriure't i perquè tu me n'ensenyes, mira: llamp, llet, llit, llot, llum.

Enric Casasses


sábado, 25 de abril de 2009

Yo voy soñando caminos

Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...

¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero,
a lo largo del sendero...
—La tarde cayendo está—.

En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día;
ya no siento el corazón.

Y todo el campo un momento
se queda, mudo y sombrío,
meditando. Suena el viento
en los álamos del río.

La tarde más se oscurece;
y el camino se serpea
y débilmente blanquea,
se enturbia y desaparece.

Mi cantar vuelve a plañir:
Aguda espina dorada,
quién te volviera a sentir
en el corazón clavada.


Antonio Machado

viernes, 24 de abril de 2009

Autobús

Ella sube al autobús en la misma parada, siempre a la misma hora, y una sonrisa mutua, que ya no recuerdo de cuándo procede, nos une en el viaje trivial, en la monotonía de nuestra costumbre.
Baja en la parada anterior a la mía y otra sonrisa furtiva marca la muda despedida hasta el día siguiente.
Cuando algunas veces no coincidimos, soy un ser desgraciado que se interna en la rutina de la mañana como en un bosque oscuro.
Entonces el día se desploma hecho pedazos y la noche es una larga y nerviosa vigilia dominada por la sospecha de que acaso no vuelva a verla.


Los males menores, Luis Mateo Díez

jueves, 23 de abril de 2009

Feliz día del libro

"Quien no haya pasado tardes enteras delante de un libro, con las orejas ardiéndole y el pelo caído por la cara, leyendo y leyendo, olvidado del mundo y sin darse cuenta de que tenía hambre o se estaba quedando helado...
Quien nunca haya leído en secreto a la luz de una linterna, bajo la manta, porque Papá o Mamá o alguna otra persona solícita le ha apagado la luz con el argumento bien intencionado de que tiene que dormir, porque mañana hay que levantarse tempranito...
Quien nunca haya llorado abierta o disimuladamente lágrimas amargas, porque una historia maravillosa acaba y había que decir adiós a personajes con los que había corrido tantas aventuras, a los que quería y admiraba,`por los que había temido y rezado, y sin cuya compañía la vida le parecería vacía y sin sentido.."

Michel Ender

miércoles, 22 de abril de 2009

Infància

Mirant des del silenci vaig aprendre de tu
el miracle dels geranis riallers,
l’oculta seducció de les falgueres,
l’alegria dels boixacs i la florida,
dolça i tenaç, de roses que plantaves
en l’ampit escàs de la nostra finestra.

Jo t’ho celebrava des de dintre,
no pas dintre de casa, sinó de més endins.
Les plantes vivien per les teves mans
que transmetien l’instint de sobreviure
i créixer en la bellesa, ni que fos
per a un escenari tan modest
com el fràgil i petit balcó de casa.

T’agraeixo que m’hagis ensenyat
allò que no s’aprèn ni als llibres ni a l’escola.
Ara tinc un jardí que no sé habitar,
i per això em sé mala deixebla.
Però, en canvi, crec en aquell instint
tenaç de sobreviure i de transmetre
que em penetrà ben bé des dels orígens.
Viuràs sempre al jardí, en nosaltres quatre,
i jo, potser, en gris paper de versos.


Vinyet Panyella

martes, 21 de abril de 2009

Poema VI

Te recuerdo como eras en el último otoño.
Eras la boina gris y el corazón en calma.
En tus ojos peleaban las llamas del crepúsculo.
Y las hojas caían en el agua de tu alma.

Apegada a mis brazos como una enredadera,
las hojas recogían tu voz lenta y en calma.
Hoguera de estupor en que mi sed ardía.
Dulce jacinto azul torcido sobre mi alma.

Siento viajar tus ojos y es distante el otoño:
boina gris, voz de pájaro y corazón de casa
hacia donde emigraban mis profundos anhelos
y caían mis besos alegres como brasas.

Cielo desde un navío. Campo desde los cerros.
Tu recuerdo es de luz, de humo, de estanque en calma!
Más allá de tus ojos ardían los crepúsculos.
Hojas secas de otoño giraban en tu alma.


Pablo Neruda
Es inconmesurable...La medida que menos le sirve a la felicidad es el tiempo: siempre la cantamos en el recuerdo. Lo mismo que la salud cumple su destino siendo olvidada, la felicidad toma cuerpo cuando se la añora ante el hueco que dejó a nuestro lado. Como el amor también en eso. Cuando ella reina no la sentimos tanto. Llamamos dichosos a ciertos instantes cuando ya han transcurrido: nos enriquece el tiempo malgastado. La felicidad vacila con frecuencia entre la nostalgia y la melancolía. Por eso nos entristece tanto volver a los lugares en que fuimos felices. Se alzó en ellos el árbol de la vida con sus miles de pájaros inquietos; se nos invitó allí a esa fiesta que siempre concluye de forma inesperada... Pero soñando despierto no se puede ser feliz. Soñar sólo te puede hacer perder días de vida: mala o buena, de vida. En ella, la felicidad es parecida a un trabajo sin un contrato fijo. Porque está en las cosas que no se planean: consiste siempre en una sorpresa; si no, sería sólo un proyecto que se ha cumplido. Hay que abrir bien los ojos, no cerrarlos. Hay que estar bien despierto. Y así y todo, así y todo... Cuánta tristeza cabe en la felicidad.

Por eso, si viene, bienvenida,gracias. Y, si no, que la zurzan. Ya arreglaremos cuentas con quien sea al final.

Los papeles de Agua, Antonio Gala

domingo, 19 de abril de 2009

En el principio

Si he perdido la vida, el tiempo, todo
lo que tiré, como un anillo, al agua,
si he perdido la voz en la maleza,
me queda la palabra.

Si he sufrido la sed, el hambre, todo
lo que era mío y resultó ser nada,
si he segado las sombras en silencio,
me queda la palabra.

Si abrí los labios para ver el rostro
puro y terrible de mi patria,
si abrí los labios hasta desgarrármelos,
me queda la palabra.


Blas de Otero


sábado, 18 de abril de 2009

Aloma es va tancar a la seva cambra i es va recolzar a l'ampit de la finestra.El cel encara no era ben negre.Hi havia ombres més fosques en el cor dels arbres.Brillava la primera estrella, molt blanca.Les cases a penes es veien, una mica esborrades entre la foscor, amb un llumet groc de tant en tant, i la nit semblava que respirés.Li havia vingut una mica de tristesa. Es va estrènyer el pit amb els braços i va posar el cap al cantell de la paret. S'hauria quedat allí molta estona si hagués tingut algú al costat que li hagués besat la cara, les mans, el dit que s'havia tallat feia dies i que encara li feia mal. Sentia obscurament la poesia pobra de la seva casa, del seu carrer, d'aquelles estrelles petites que anaven sortint. Era un llanguiment dolç a tot el cos, amb la frescor de la paret a la galta.

Aloma,Mercè Rodoreda

Ando

En sueños ando surcando espaldas,
todas en una la tuya son,
ondulándose como el trigo,
hasta en pedregosos caminos
cimbreando la cintura,
haciendo un sexuado destino,
un dibujo de la penumbra,
en él alambro el desatino
de quererte hasta la muerte
o por lo menos hasta el alba,
y con mis malos despertares olvidarte
cuando quiera ó cuando pueda
mientras vadeo los ríos,
los de siempre,
los de nunca,
de tus sueños,
de los míos.


Kutxi Romero

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Entre esas calles de lluvias y brumas caminé descalza acariciando las texturas del espacio vació que me llenaba por dentro. Entre miradas que abrían puertas en mi alma robando el sueño y la respiración, conseguí adelgazar mi voz hasta convertirla en una suerte de ecos y susurros que captaban cada uno de nuestros segundos y transportaban nuestras imágenes hacia donde él crepúsculo caía. El color de las voces se hacía visible y tu dulce melodía me arropaba en lo inhospito. Los perfumes se dibujaron en la brisa como una de las pinceladas de Van Gogh o una de las mágicas palabras de Victor Hugo, junto al utópico horizonte. Como un oscuro Abril donde el Titanic tocó fondo. Como la noche que ahora cae sobre mi. Como si el mundo ya no fuera a ver una mañana más. Ven junto al ritmo de los pasos. Deja que el silencio nos tome a los dos. Tú y tu negro pelo. En esta noche amanzanada quiero soñar contigo entre tus brazos.


Brenda
http://www.safecreative.org/work/0904153071651

Poema para el Crepúsculo

Hora de soledad y de melancolía,
en que casi es de noche y casi no es de día.
Hora para que vuelva todo lo que se fue
hora para estar triste, sin preguntar por qué.


José Ángel Buesa